¿Estás pensando en hacerte un tatuaje pero tienes miedo al dolor? Te contamos cuáles son las zonas que menos duelen para tatuarse.
En nuestro estudio podrás hacerte tatuajes fine line en Madrid, así como piercings, tattoos de todo tipo de estilos y microblading.
¿Qué zonas duelen menos para tatuarse?
Si le preguntas a algún/a amante del tatuaje si le dolió decorar su cuerpo, lo más probable es que te diga que no. Lo cierto es que tatuarse es una experiencia tan especial, que la molestia pasa a segundo plano.
También es cierto que las sensaciones siempre son subjetivas, y lo que unos recuerdan como doloroso, otros pueden no haberlo ni notado.
En las partes más cercanas a los huesos, la molestia suele ser mayor. En ellas la piel es más fina, menos tirante, tiene más terminaciones nerviosas y una menor cantidad de grasa.
Si tolero mal el dolor, ¿dónde me tatúo?
Nuestra recomendación es que te guíes por lo que realmente quieres. Si siempre has deseado tatuarte en una parte concreta de tu cuerpo, adelante.
Un tatuaje es para toda la vida, es un recuerdo y una parte de ti. Tatuarte en una zona que no te gusta es recordar eternamente que no es ahí donde querías tenerlo.
Si en tu caso lo importante es el tatuaje en sí y no el lugar donde te lo pongas, toma nota de las partes del cuerpo donde menos molestia se nota:
- Parte delantera del muslo: suele tener suficiente grasa, y pocas terminaciones nerviosas, por lo que la molestia de tatuarse en esa zona es tolerable.
- Antebrazo: su piel es tirante, gruesa y tiene muchos músculos. Las terminaciones nerviosas están menos presentes y el dolor suele ser moderado o bajo.
- Parte exterior de los hombros: ocurre lo mismo que en el antebrazo. Hay pocas terminaciones nerviosas y la piel es tirante y gruesa, perfecta para tatuarse.
- Parte exterior del bíceps: el dolor es moderado en esta zona en la que hay muchos músculos y pocas terminaciones nerviosas.
- Pantorrilla: esta zona es conocida por lo liviano de la molestia al tatuarse.
- Espalda: no todas las zonas de la espalda son iguales, en este caso nos referimos a la superior y la inferior. Las partes que debemos evitar, si no queremos dolor, son las de la columna y la cadera.
- Glúteos: no es una zona muy común, pero sí muy llevadera. Tatuarse esta parte del cuerpo es de las que menos molestias provoca.
Por supuesto, esto está basado en un estándar. Cada persona es un mundo y siente el dolor de manera totalmente diferente.
Debemos tener en cuenta también que factores como la edad, la cantidad de grasa y las experiencias del cliente influyen enormemente en la molestia que se percibe.
Por lo tanto, las zonas que menos duelen para tatuarse suelen coincidir con las mencionadas anteriormente, pero es posible, y muy normal, que tú lo notes de otra manera.
