Tatuar cicatrices y quemaduras es cada vez más habitual. Muchas personas buscan taparlas, y otras honrarlas como parte de su historia.
Desde los tatuajes de línea fina en Madrid que realizamos en nuestro estudio, hasta cualquier otro tipo y estilo, son muchas las opciones que existen para adornar la piel.
Tatuar cicatrices y quemaduras: una transformación en arte
Cubrir las cicatrices con tatuajes no es una cuestión meramente estética, va mucho más allá. Se trata de un profundo impacto emocional, pues las cicatrices son, en muchos casos, recordatorios de momentos difíciles.
La transformación que supone tatuarlas es un cambio en la percepción, tanto física como emocional, una reconciliación con la propia historia.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que tatuar una piel dañada requiere una técnica precisa y unos cuidados especiales.
Consideraciones para este tipo de pieles
Las cicatrices tienen distintos tamaños, formas y texturas, lo que hace que su cobertura sea única. Cada tatuaje lo es, pero en este caso aún más.
Cortes, incisiones quirúrgicas o quemaduras afectan a la piel de diferente manera, por lo que su cobertura requiere personalización absoluta.
Algunas consideraciones que se deben tener en cuenta son:
- Forma y tamaño: dependiendo de esto puede elegirse un diseño que cubra la cicatriz o que fluya naturalmente con ella. Son muy comunes los motivos orgánicos como flores, árboles, animales, etc. También las formas abstractas, pues se adaptan muy bien a las líneas irregulares.
- Profundidad y textura: existen cicatrices queloides, hipertróficas, atróficas, etcétera, que presentan distintas texturas. Algunas se elevan sobre la piel, otras se hunden y otras presentan varios grados de profundidad. Un buen tatuador/a sabe cómo adaptar los diseños a esas variaciones.
- Pigmentación: es habitual que las cicatrices tengan un tono distinto al del resto de la piel. El tatuador/a debe tenerlo en cuenta para hacer que el tatuaje se vea uniforme.
Por eso recomendamos, sí o sí, acudir a un estudio de tatuajes de plena y máxima confianza.
¿Cómo saber si un estudio de tatuajes es de confianza?
- Lo primero, y nuestra máxima recomendación, es ir al estudio.
- Hay ciertas cosas que solo se ven en persona, como por ejemplo el trato al cliente, la higiene, etc.
- Además, puedes mirar también sus reseñas en Google y sus diferentes redes sociales.
Si ya tienes todas estas cosas claras, te esperamos en nuestro estudio fine line de Madrid centro que cumple con todo lo mencionado anteriormente.
Antes de tatuar cicatrices y quemaduras debes saber esto
Tatuar sobre cicatrices, lógicamente, no es igual que tatuar sobre el resto de la piel. Antes de proceder, es muy importante que te asegures de los siguientes aspectos:
- Que la cicatriz está completamente curada, ya que una cicatriz en proceso de sanación puede cambiar de forma y textura y afectar al tatuaje.
- Que tu médico considera que tu piel está preparada para tatuarse. Es importante acudir a consulta, especialmente en caso de cicatriz por quemadura grave o condición médica especial.
- Que la piel que contiene la cicatriz reacciona positivamente a la tinta.
Tatuar cicatrices y quemaduras es todo un arte, pues la presión de la aguja es distinta, la cantidad de tinta también, y los colores y las sombras deben seleccionarse cuidadosamente para que su apariencia sea la adecuada.
Además, los cuidados posteriores deben alargarse un poco más que los de los tatuajes en piel sana. Es fundamental recordar que se trata de piel más frágil y propensa a infecciones que debemos limpiar y cuidar con pomadas antibacterianas y sin exposición al sol durante la curación.